Por Marcelo Luna
La miniserie de Netflix, Naomi Osaka, dirigida por Garrett Bradley, narra la vigente carrera de la 4 veces ganadora del Grand Slam. En ella se cuentan pasajes de su vida desde qué fue lo que la llevó a dedicarse al tenis, hasta los problemas de salud mental que la llevaron a pausar su carrera. Además, la producción permite conocer cómo le afectó la partida de uno de sus grandes amigos e ídolos, Kobe Bryant.
Naomi Osaka nació el 16 de octubre de 1997 en Japón. Actualmente tiene 24 años y juega tenis desde los 3, por ello, ella se cataloga como un objeto ya que su vida se resume en entrenar y jugar al tenis. Decidió dedicar su vida al tenis profesional para que su madre deje de trabajar y logró convertirse en la primera tenista japonesa #1 en el mundo, por lo que decidió exigirse más de lo debido y presionarse para mantenerse en la cima, ya que antes de ganar su primer Grand Slam nadie la conocía.
Naomi ganó su primer Grand Slam a la edad de 21 años derrotando a Serena Williams en la final del US OPEN 2018. Defendió su título al año siguiente en el US OPEN 2019, pero fue eliminada en octavos de final ante Belinda Bencic. Al ser la campeona defensora, Osaka sintió demasiada presión, y tras su eliminación, se sintió decepcionada porque estaba enfocada en ganar.
Decidió irse a Tokio para tomar un descanso mental, y fue allí donde comenzó a cuestionarse: “Todos me conocen por ser una buena tenista, pero al ser eliminada prematuramente, ¿Qué realmente soy si no soy una buena tenista?
Aquello es un presagio de lo que la serie trata en sí, pues su entrenador, Wim Fissette, confesó que Naomi después de ser eliminada en el US OPEN New York 2019 presentó cuadros de ansiedad, y que dicho estrés le jugó una mala pasada la noche antes de su debut en el Australian Open 2020. “La noche anterior al inicio del torneo (Australian Open 2020), Naomi no pudo dormir. Soñó que no ganó el torneo y se despertó asustada, sudando”. Agregó que para su pupila no basta con pasar de ronda o llegar a cuartos de final, como es el caso de muchos otros deportistas, sino que ella siempre va por el título y si no lo logra, se decepciona.
Se tocó el fallecimiento de Kobe Bryant y cómo le afectó a Osaka. La partida de Kobe perjudicó significativamente a la oriunda de Japón, llevándola a ser eliminada en la fase clasificatoria de la FED Cup y a contener las lágrimas en el partido. Ella admiró su mentalidad de campeón, la cual consiste en saber manejar la presión y controlar los fallos a los que un deportista está expuesto, pero se sintió frustrada al no poder lograrlo y decepcionar a Bryant, pues considera que tiene una mente débil y ello le juega en contra.
Stuart Duguid, manager de Osaka, comentó que los problemas de salud mental de Naomi no solo se deben al tenis, sino también a la opinión pública. Por ello trata de no meterse en controversias y no manifestarse acerca de lo que sucede en el mundo ajeno al deporte. Sin embargo, tras lo sucedido con George Floyd, Osaka decidió unirse al paro de Black Lives Mattery no competir en las semifinales del Grand Slam del oeste y sur 2020.
Asimismo, en el US OPEN 2020, Naomi ingresó a la cancha con una mascarilla que llevaba el nombre de Breonna Taylor, quien fue una mujer afroamericana asesinada por la policía en marzo de 2020. Le preguntaron si utilizaría esa mascarilla para cada juego y respondió que no. Dijo que tenía 7 mascarillas con nombres diferentes y lamentó que 7 no sean suficientes para dar a conocer todos los nombres de las personas afro asesinadas.
La salud mental es igual de importante que la salud física, ya que sirve para optimizar el rendimiento del deportista y es complementaria al trabajo técnico, táctico y físico, los 4 pilares fundamentales en el trabajo de los atletas de alta competencia según Mario Reyes Bossio, especialista en psicología deportiva. Es en este tema en el que se basa prácticamente toda la miniserie de Naomi Osaka, por lo que es importante que el deportista solucione estas dificultades cuanto antes, ya que, sin una óptima salud mental, el atleta no puede desarrollar su vida diaria ni deportiva
Lamentablemente la relevancia de la salud mental no es reconocida por todos y se asume que el deportista debe ser capaz de solucionar sus problemas por sí solo. Por ende, no muchos se encuentran abiertos a hablar públicamente sobre el tema debido a que se considera débiles a las personas que presentan dificultades relacionadas a este asunto.
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