Por Darenka Abanto
La altura promedio de los basquetbolistas que llegan a pertenecer a la National Basketball Association (NBA) es alrededor de los 2 metros y todos los equipos tienen algún jugador de al menos 2.10 metros. Sin embargo, este no es un requisito para destacar en el básquetbol profesional y, a lo largo de su historia, se han podido observar jugadores de gran calidad que no están dentro de esta marca.
Este es el caso de Tyrone Curtis “Muggsy” Bogues, quien nació en Baltimore, Maryland el 9 de enero de 1965, es el jugador más pequeño que ha tenido la NBA con 1.59 cm. Jugó baloncesto universitario con los Wake Forest desde 1983 hasta 1987, cuando fue drafteado por los Washington Bullets. En su momento se pensó que fue una estrategia publicitaria, ya que el equipo contaba con el jugador más pequeño y también con el jugador más alto.
No obstante, no fue un espectáculo de la liga que se exhibió como inaudito, sino que llegó a participar en 14 temporadas, jugando como point guard o base y ha sido uno de los mejores jugadores en su posición, capaz de jugar 889 partidos en la liga y promediar en una temporada completa 10.8 puntos, 4.1 rebotes, 10.1 asistencias y 1.7 robos por partido, en 1994 con los Hornets.
Muggsy no significa ratón
Muggsy Bogues jugó en el equipo de baloncesto de su instituto y participó en los playgrounds de Estados Unidos, es de ahí de donde remonta su apodo, que, muy por el contrario de lo que todos piensan, no tiene nada que ver con su altura, sino con su gran habilidad de juego. El exjugador era dueño de una increíble destreza para robar balones en cualquier punto de la cancha, su nombre “Muggsy” proviene de la acción en el básquetbol llamada “mugging” que significa atracar. Cuando formó parte de la NBA, fue reconocido como uno de los grandes ladrones de la liga, ya que llegaba a hacer más de dos robos por partido.
Impecable destreza en el campo
Con su 1.60m, Tyrone Bogues destacó en la cancha por su velocidad, dominio del balón, visión y lectura de juego, asistencias y el arte de escabullirse y robar balones. Sin embargo, hay otra habilidad de este gran talento americano: su salto vertical, el cual llegaba a alcanzar 1.10 metros de altura.
El salto promedio vertical de una persona que no practica básquet, es entre los 40-45cm, según Home Exercirse Equipment Central (2019), y los saltos más altos de la historia de la NBA corresponden a Dwayne Mitchell, en 2012, y Justin Anderson, en 2015, con 96,52 cm (Bajo, 2020).
Una infancia dura que marcó sus metas
Tyrone, hijo de Richard y Elaine Bogues, creció junto a sus hermanos Richard, Anthony y Sherron en el sector este de Baltimore, en el estado de Maryland. Cuando tenía 5 años, escuchó un ruido a mitad de la noche de las viviendas públicas de Lafayette, y decidió ver qué era lo que estaba pasando: un asalto en una tienda cercana. El dueño se defendió y disparó, haciendo que una de las balas impacte en el pequeño Bogues:
“Aquel accidente cambió mi vida. Y mi cabeza… Aunque era muy chico entendí que había que salir de allí, como fuera. Esa noche supe que la vida podía terminarse en un instante y que tenía que luchar por otra diferente”, comentó para Infobae en 2020.
A Muggsy no le regalaron nada, al ser de una familia de clase baja, tuvo que trabajar el doble que el resto para llegar a la cima de este deporte. Desde pequeño, su objetivo fue romper los estereotipos de un base, por lo que destacó en el equipo de su escuela Dunbar High y, una vez empezó a subir, nadie lo detuvo.
Con el dinero que ganó con la firma de los Bullets (1M$), buscó darle una mejor calidad de vida a su familia: comprarle una casa a su madre, contratar un nuevo abogado para sacar a su padre de la cárcel (quien fue declarado culpable de robo a mano armada) y ayudó a uno de sus hermanos a alejarse de las drogas.
Las estadísticas rompieron los estereotipos
Muggsy tiene los mejores promedios de la NBA en sus 14 temporadas: 7.7 puntos, 2.6 rebotes y 7.7 asistencias en 889 partidos disputados. Sólo 28 jugadores en la historia han logrado finalizar una temporada de la NBA superando las 10 asistencias de media por partido, Tyrone Bogues lo hizo dos veces midiendo 1.60 cm. Actualmente el basquetbolista retirado tiene 56 años y hasta la fecha es el jugador más pequeño de toda la historia de la NBA, con 1.59 metros.
Cuando Infobae le preguntó cuál creía, él, que era la clave de su éxito, respondió sin dudar: “Ser consciente de mí mismo. Reconocer mis fortalezas, mejorar a los demás y reconocer las áreas en las que puedo trabajar para mantener una forma de juego que me permita mantenerme durante años”.
El legado y actualidad
Su marca en la historia del basquetbol todavía permanece, ya que él figura en el puesto 23° de la tabla histórica de asistencias de la NBA, pero no se quedó ahí, Bogues decidió continuar con su legado ayudando a miles de jóvenes a través de la fundación sin fines de lucro Muggsy Bogues Family Foundation.
Esta, fomenta programas para que adolescentes y jóvenes de entre 12 y 18 años alcancen su sueño de triunfar en el deporte al mismo tiempo que puedan terminar sus estudios.
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