Por Gonzalo La Torre Elera
Hace unas cuantas semanas nuestra primera raqueta logró entrar a la lista de los cien mejores tenistas del mundo. Eso no sucedía hace más de una década, pero hoy en día nos confirma que eso no es todo lo que tiene para dar en su carrera. Para él, antes que una distinción individual está su patria.
Juan Pablo Varillas se vuelve un competidor voraz cuando representa a la selección peruana. Todos conocen su carácter al momento de disputar un partido de Tenis pero por su bandera lucha aún más. En la última serie de Copa Davis, frente a Chile, demostró que está dispuesto a dejarlo todo, una de nuevo. En la fecha pasada contra Bolivia jugó más de 5 horas y declaró que aunque el cansancio influye en esos momentos surge la actitud. Aunque ya venía mostrando esa garra desde el 2020, cuando participó en la serie contra Suiza, pareciera que cada vez se potencia aún más con el apoyo de su gente.
Juanpi, Juanpi, Juanpi… Coreaban las tribunas. A Varillas le tocó igualar la serie dos veces, primero en el segundo punto, cuando estábamos 0-1 abajo. Se impuso a Nicolás Jarry, el que al final le daría la victoria a Chile, y luego volvió a empatar la fecha, 2-2, tras ganarle a la raqueta número uno de Chile Alejandro Tabilo. La serie se la llevó Chile 3-2 y celebraron como amerita una victoria frente al clásico rival pero la hinchada peruana quedó con bronca, y eso es positivo porque se identifica con su equipo. El tenis cada vez se aleja más de ser el deporte blanco, al menos en nuestra región.
Pero en el último partido de la serie, el de Nico Álvarez contra Jarry, Juan Pablo tuvo un rol activo desde la banda. Estuvo apoyando a su compañero todo el encuentro, dándole ánimo incluso cuando la barra peruana guardaba silencio. Tupi Venero es el capitán pero Juan Pablo es el líder del grupo. El equipo lo respeta y admira, pero más importante que eso es que lo aprecian. Juanpi ya lo había hecho antes, aunque ahora asume su lugar con mayor presencia, quizás por la confianza de volver a la lista de mejores tenistas del mundo.
El desenlace no fue el que la gente peruana quería pero de algo pueden estar seguros: tienen un referente positivo para el grupo. Varillas tiene 26 años, quedan muchas bolas por servir y otros varios puños por levantar con la barra nacional.
Alex dice
Efectivamente, Varillas no solo es el mejor tenista perusno dentro sino fuera de la cancha, es el Guerrero del deporte de las raquetas. Ojalá nos permita gozar de más logros por varios años.
Alex dice
Efectivamente, Varillas no solo es el mejor tenista peruano dentro sino fuera de la cancha, es el Guerrero del deporte de las raquetas. Ojalá nos permita gozar de más logros por varios años.