Por Juan Camilo Ochoa
Gerd Müller puede ser un nombre relativamente desconocido para las jóvenes generaciones que recién se engancha al fascinante mundo del fútbol ya que el delantero alemán colgó las botas hace casi cuarenta años. Sin embargo, lo legendario de su figura y su significancia para el mundo del fútbol es tal que sus hazañas son y serán recordadas por la eternidad. Hoy intentaremos enmarcar su carrera a través de sus mejores momentos como futbolista e icono del futbol alemán
Gerhard Müller o mejor conocido como Gerd, no solo es el máximo goleador histórico de la Bundesliga y el sexto goleador de la historia del fútbol. Fue y es considerado el mejor centrodelantero del mundo y leyenda absoluta del Bayern Múnich. Con su selección fue campeón de Europa y obtuvo la gloria máxima de levantar la Copa del Mundo. Su fallecimiento el pasado 15 de agosto nos sirve como excusa para recordar los mejores momentos de su carrera.
El nacimiento de la leyenda bávara
Müller comenzó a forjar su leyenda en el Bayern Múnich junto a dos figuras emergentes como él. Franz Beckenbauer y Sepp Maier formaron parte de la plantilla de 1964 y junto al ariete alemán se abrían paso por el fútbol alemán hasta escribir su nombre en la historia del club bávaro. Con el conjunto alemán logró alzar cuatro Bundesliga, tres Champions League, cuatro copas de Alemania, una copa intercontinental y una recopa de Europa.
Un torpedo de selección
Con la selección alemana, Gerd Müller participo en dos mundiales (México 70 y Alemania 74) y una Eurocopa (Bélgica 72). En los mundiales logró consagrarse como un goleador letal, en el Mundial del 70 marcó diez goles, con un hat-trick incluido a Perú y llevándose el título de máximo goleador. En el Mundial del 74 logró marcar otros cuatro goles, marcando el gol en la final ante Holanda y consagrándose campeón del mundo por primera vez y logrando la segunda estrella para Alemania. En la Eurocopa del 72 obtuvo el título de goleador con cuatro goles y alcanzó a levantar la copa. 68 goles en 62 partidos lo ponen como el segundo máximo goleador de la selección alemana y el que mejor promedio de gol tiene con 1.09 por partido.
Torpedo de oro
Gerd Müller no solo es un ganador nato en lo colectivo, sino que gracias a su actuación en el Mundial de México 70 fue escogido como Balón de Oro, y por lo tanto el mejor jugador de ese año. Además, también logró ser nombrado el mejor futbolista del año en Alemania en dos ocasiones en 1967 y 1969. Sus registros goleadores con 735 dianas lo ubican el sexto lugar en la lista de los máximos goleadores en la historia del fútbol según la RSSSF. Entre sus distinciones personales resalta que es el único jugador en la historia que ha marcado en una final de copa de Europa de clubes, en una final de Eurocopa y en una final del mundial, habiendo ganado todas las finales en las que anotó.
Luces y sombras de Gerd Müller
Luego de su paso por el fútbol estadounidense en el Fort Lauderdale Strikers – donde jugó junto a Teófilo Cubillas – y su posterior retiro en 1982, el legendario Gerd Müller fue atrapado por la depresión por acabar su carrera futbolística y recurrió el alcoholismo como fórmula de escape a su tristeza. En los bares de los Estados Unidos se pudo ver por esos años los despojos del ariete alemán. Gracias a sus amigos Franz Beckenbauer y Sepp Maier, que lo recogieron de esa precaria situación y junto a el presidente bávaro Heinz Rummenigge lograron hacer que ocupara el cargo de entrenador de la sub-20 del Bayer Múnich en el año 2002, donde entrenó jugadores de la talla de Paolo Guerrero. Finalmente, tuvo que dejar el puesto por principios de alzhéimer en el 2015.
La vida de Gerd Müller está llena de éxitos y derrotas, su fallecimiento el pasado 15 de agosto nos priva de uno de las mejores delanteros de la historia del deporte rey, sino el mejor, y de un jugador que con sus actuaciones y goles marco época en el fútbol alemán y el panorama internacional.
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