Por Guillermo Falcón
El club Lawn Tennis abrió sus puertas para una eliminatoria de Copa Davis más de 1 año después y fue de manera muy emotiva. Perú enfrentaba a Bosnia & Herzegovina por el Grupo Mundial I, con la alegría de una afición agradecida de presenciar un espectáculo deportivo de primer nivel. La serie no sería sencilla: Bosnia contaba con jugadores con experiencia en grandes torneos y estarían a la altura de un encuentro internacional.
Día 1: Cumplieron los números 1
El primer partido de la serie fue entre Nicolás Álvarez y Damir Dzumhur. La primera raqueta de Bosnia ante la segunda de Perú. El partido comenzó con el bosnio muy concentrado y contundente. Nico no encontraba soluciones y no estaba cómodo en la cancha, lo cual se tradujo en un 6-2 para Dzumhur. Sin embargo, Álvarez en ningún momento mostró algún gesto de inconformidad o enojo. La calma era importante y se tornó en confianza para el segundo set: empezó 4-0 arriba. Si Nico mantuvo la concentración, Dzumhur empezó a cometer errores y demostrar su incomodidad en la cancha frente a su banca. Esto no le permitió enfocarse totalmente en el juego y demostrar por qué actualmente está fuera del top 100 del ranking: su inestabilidad emocional en la cancha. A pesar de ello, recuperó terreno en el set y consiguió forzar el tie break. Álvarez consiguió ganarlo. De este modo, se definía el encuentro en el tercero. En el inicio, Nico no entró concentrado y Dzumhur comenzó de excelente forma, lo cual fue clave para iniciar con quiebre arriba y mantener la ventaja hasta ganarlo por 6-3. El punto 1 era para Bosnia y la responsabilidad cargaba para Juan Pablo Varillas.
Era el momento del número 1 peruano: Juan Pablo Varillas enfrentaba a Mirza Bašić. Empezó con seguridad, pero el bosnio mostraba señales de no ser un rival sencillo. Incluso estuvo cerca de ganar el primer set cuando sacó 5-4, pero Juan Pablo lo impidió y supo salir adelante: logró remontar el marcador para llevarse el parcial por 7-5. Hasta ese momento, no se había visto la mejor versión de Varillas, tuvo varios errores no forzados, aunque poco a poco recuperó la confianza. En el 2° set fue el protagonista al adelantarse por 2-0, aunque no mantuvo la diferencia y Bašić no daba su brazo a torcer. Juan Pablo tuvo varias chances de match point, sobre todo cuando estaba 6-5, pero su rival no se rendía y alcanzó el tie break. Hasta 9 puntos necesitó Varillas para ganarlo y asegurar el 1-1 en el primer día. En declaraciones post partido, afirmó su conformidad por lograr el triunfo y resaltó la dificultad del debut, debido a que debió encontrar el ritmo adecuado para desplegar su mejor juego.
Día 2: de menos a más
El primer partido de la segunda jornada era de dobles. Sergio Galdos y Brian Panta enfrentaban a Tomislav Brkić y Mirza Bašić. El primero de ellos vive su mejor momento como doblista (52° del ranking de dobles) y lo ratificó en la cancha: ganaba puntos en la red y brindaba seguridad a su compañero. La dupla peruana se acopló de buena manera, con Galdos muy firme en sus golpes y movimientos. Sacaron 5-4 con la oportunidad de ganar el set, pero no lo cerraron y esto fue aprovechado por el dúo bosnio: fue 7-5 y la confianza para el segundo, donde Brkić impuso su jerarquía y no permitió reaccionar a Panta y Galdos. Un contundente 6-2 para conseguir el segundo punto y obligar a Perú a ganar los 2 singles para clasificar.
Una vez más, la responsabilidad estaba en manos de Juan Pablo Varillas. Él estaba enfocado: sabía cuál era su objetivo y desde el primer punto salió a demostrar su categoría. Desde el inicio, Dzumhur se notaba desconcertado ante el juego de Juan Pablo y cayó en la desesperación de forma similar a su anterior partido: discusiones con el umpire o árbitro de silla, reclamos a su banca y gestos de disconformidad consigo mismo. Esto se traducía en errores, los cuales beneficiaban a Varillas. El marcador reflejó estos elementos: 6-1 para Juan Pablo, quien no le dejó ninguna chance a su rival. Siguió con un nivel parejo y una autoridad notable en la cancha. Pocos errores, golpes de derecha muy efectivos y velocidad de reacción, sobre todo cuando Dzumhur tiraba “drops” y lo acercaba a la red. Finalmente fue 6-3 en el segundo y 2-2 el marcador. Esta victoria fue clave para motivar al equipo. Así lo afirmó el capitán Américo “Tupi” Venero en la conferencia post partido. Era el turno de Nicolás Álvarez.
Cuando las definiciones son cerradas, cualquier suceso inesperado es impactante. Quizá eso pensó el capitán Zoran Zrnic al designar a Nerman Fatic en lugar de Mirza Bašić para la definición. El factor sorpresa dio resultado y Fatic se adelantó 2-0, pero Álvarez reaccionó rápidamente para igualar el marcador. Poco a poco, Nico tomó confianza en la cancha. La mayoría de puntos eran desde el fondo de la cancha y ambos destacaban por la potencia de sus golpes. El primer set se definió por tie break, donde Álvarez fue de menos a más y lo ganó. El Lawn Tennis empezaba a ilusionarse con la victoria, pero el segundo set sería un carrusel de emociones para todos. Tanto Álvarez como Fatic mostraron altibajos: ambos perdieron con su saque una vez y el juego se tornó en quién cometía menos errores. Nico se adelantó por 5-3 y sacaba para partido, tuvo un match point, pero no lo cerró. Fatic se aferraba a conseguir una épica remontada, pero Álvarez demostró coraje para imponerse. El 6-4 desató la algarabía de los aficionados y el equipo peruano: todos los jugadores corrieron a abrazarlo y reflejar la unidad del plantel. Perú logró la victoria por 3-2 ante Bosnia & Herzegovina y deberá disputar un repechaje en noviembre en busca de acceder a las Qualifiers del 2022. Volvió la Copa Davis a Perú y el Lawn Tennis vivió 2 emocionantes jornadas de excelente nivel. El rival está por confirmarse, pero el equipo peruano ha demostrado estar preparado para cualquier reto.
Deja una respuesta